Cuando pases por Piribebuy podes visitar las cascadas. Me recomendaron unos amigos en Samber.
En la ruta a Paraguari, un cartel escrito a mano llamo mi atención. Un camino sinuoso, sin banquina en medio de una muy exuberante vegetación.
Por diez mil Guaraníes puedes acceder a dos miradores naturales y si quieres caminar puedes llegar a las cascadas “un lugar espectacular”.
Virgilo espera, los que interesados por su oferta, se detienen en un pequeño espacio al costado de la ruta ganado al monte .
Con la ayuda de sus muletas avanza por delante unos metros en el sendero, abierto a machete y señalado con trozos de plástico atado a las ramas o flechas pintadas en las rocas.
Se detiene y apoyado sobre una de sus muletas, usa un extremo como extensión de su mano derecha para dibujar en la tierra las indicaciones para llegar a las cascadas.
A la vuelta lo encontré en los senderos indicándoles a una pareja con un pequeño perro en brazos de una joven.
Quizá no era el lugar del que me hablaron o al menos difería con las imágenes que construí sin conocerlo. La humedad, el esfuerzo para llegar, el canto de los pájaros, los sonidos del agua, el viento y los animales de la selva. El momento y la oportunidad de estar sólo, quizá hicieron de éste un lugar muy especial.
“aprendí que lo que vale es levantarse”Virgilio Montiel (47)