111 días y cuatro tanques.

Un año atrás las lluvias en el río Bermejo desviaban mí rumbo norte. Si vas a recorrer el continente acá te espero, exactamente donde comienza Latinoamérica, me indicaba un amigo fotógrafo, desde Tijuana. Camino al este en Paraguay, rumbo a la costa de Brasil, Cristina me convenció de volver y votar por Alberto, dí una vuelta por Uruguay llegue a Salta. El 10 de diciembre lo festejé en la plaza de mayo y retome la ruta rumbo a la Patagonia en busca del extremo sur. Tenes que conocer el Alto Valle y el Rio Negro. Acababa entrar en la Patagonia zigzagueado por la costa. Remonté por el río hasta los valles durante dos meses y de vuelta por la linea sur mé encontré donde partí con la pandemia y las restricciones de circulacion. #Quedate en casa, es la consigna de cooperación social. Con el pasar de los días se modifican nuestras costumbres, inquietudes y actividades. Leer, fotografiar, revelar, desarmar, editar, escribir, hacer pan. Se puede salir a caminar. Me asomo al mar, busco las ballenas en el horizonte (la temporada comienza en julio) la luz de la tarde se torna muy particular. El viento es seco y frío cada vez más frío y los pájaros lo aprovechan para suspenderse en el aire. En el departamento que ahora habito ya están mis ropas, utensilios, camaras y objetos que me acompañan. Victoria, está aliviada la arranco al menos cada dos días. Hago fotos. El 24 de marzo fue un momento particular, reflexivo. Voy registrando lo que tengo conmigo, las luces de los días, mi entorno, desde la puerta de mi habitación veo cuatro tanques de agua alineados sobre los techos. El patio del vecino, la veleta de la otra cuadra o los arreboles de las tardes. Desde hace algunos días las fronteras se extendieron a dos pueblos cercanos solo con las mínimas restricciones. El barbijo nos acompañará en lo cotidiano. Salir a la playa e incluso reunirnos en grupos de hasta 10 personas ahora es posible. La circulación del virus es un dato que se añade al meteorológico. Festeje varios cumpleaños entre ellos el mío, los nuevos amigos son parte del saldo positivo de estos dias de aislamiento. Ví toda una familia de delfines junto a unos surfers que se detuvieron a contemplarlos. ¿Como y cuando seguire este viaje? No sé. ¿Alguien sabe que será del mañana? Conectarme con lo que no conozco, descubrir y asombrarme, aprender. Quizá algo resulte de esta bitácora o registro de viaje.